Su legado, experiencias y un estadio: Anécdotas que compartió el exatleta Pedro Grajales con nuestros estudiantes
El digno representante vallecaucano de las glorias del deporte de Colombia, contó en la clase, experiencias desde el inicio de su carrera deportiva en el año 1961 y cuando consiguió preseas en Juegos Bolivarianos, Centroamericanos, Panamericanos, Juegos Olímpicos en Tokio, en el año 1964, y otras importantes justas de talla mundial; asimismo relacionó la situación del deportista de la época al deportista élite que hoy en día se está formando. “Nuestra situación como deportistas era antes muy distinta, ahora el atleta cuenta con mucho apoyo y facilidades para salir adelante, tanto así que el país cuenta con esta universidad dedicada a cualificar el deporte”, destacó.
En el desarrollo de su intervención, Grajales compartió con los estudiantes la importancia de estar ligados a los procesos de cualificación para aprovechar grandes oportunidades.
“Compartí gratas historias con estos jóvenes que van a ser los futuros técnicos, metodólogos y directivos del deporte en nuestro país y el mundo, les hablé de la importancia de cualificarse en el deporte, de enfrentarse a grandes retos como participar en justas deportivas de talla mundial y hablar un segundo idioma, que en las carreras afines al deporte, se constituye como un factor importante porque los deportistas y quienes los rodean, están constantemente atravesando el mundo para representar a su país”, dijo el exatleta, quien habla con orgullo del estadio de atletismo que lleva su nombre y que está al servicio para las prácticas de estudiantes de la Escuela Nacional del Deporte y la comunidad caleña.
Al finalizar, Pedro Grajales con su estilo jocoso y descomplicado que lo caracteriza, resaltó la preparación de nivel que tienen los egresados de la Institución Universitaria y aplaudió los esfuerzos que ha hecho durante el paso de los años, el Rector, Dr. José Fernando Arroyo Valencia para hacer crecer la universidad del deporte.
“Yo conocí esta Escuela cuando tan solo era una institución muy pequeña y es un orgullo ver que ahora se ha convertido en una gran universidad, sin lugar a dudas se debe al trabajo del Dr. Arroyo y de las personas que lo han rodeado para sacar adelante esta magnífica universidad”, concluyó.